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lunes, 27 de julio de 2009

La importancia del agua

El agua es el nutriente más importante para los seres vivos, incluyendo por supuesto a nuestros animales de compañía.
El agua es el componente más abundante del organismo (60-70 % del cuerpo es agua), el requerido en mayor cantidad cada día y aquel a cuyo déficit el animal es más sensible.
Todas las células del cuerpo requieren agua para su funcionamiento, pues se trata del medio en el cual tienen lugar todos los cambios químicos.
Interviene en la digestión, absorción, transporte, utilización de los nutrientes son llevados por la sangre (el agua es su principal componente) hasta los tejidos y los productos de desecho producidos por éstos.
El animal obtiene su necesidad diaria de agua de tres fuentes diferentes:
1. La que obtiene por la bebida (sensación de sed, señal que avisa de que el ingreso de líquido es necesario). 2. La contenida en los alimentos (alrededor de un 75% si come alimentos caseros o enlatados y un 10 % si come pienso seco). 3. La obtenida por el propio metabolismo del animal.
El requerimiento en agua de un perro en ml/día es de aproximadamente, igual a sus necesidades energéticas en kilocalorías.
Tanto en condiciones fisiológicas especiales (ejercicio, calor, lactación, etc.) la necesidad en agua, lógicamente, se incrementa.
Una ingestión insuficiente de agua traerá como consecuencia una ingestión también insuficiente de comida, si no bebe no come.
Si suministramos al perro varias comidas al día, en lugar de una sola, (para un perro adulto dos es suficiente), éste incrementará su consumo de agua. Además, dos comidas diarias evitan una sobrecarga del aparato digestivo, sobre todo en razas grandes y mejorará la eficacia de la digestión y el aprovechamiento de los nutrientes.Agua
La disminución en la ingestión voluntaria de agua puede ser debida a diversos factores, tales como mala o poca disponibilidad, agua muy fría o muy caliente, agua de poca calidad o cuando la hemos dejado muchos días en el bebedero.
Una característica diferencial de perros y gatos es que éstos apenas sudan, por lo que los fenómenos de termorregulación se realizan mediante la expulsión de vapor de agua por la boca, jadeo, expulsando agua químicamente pura. Por este motivo tampoco pierden sales. Por ello, al remplazar el agua perdida por los perros tras ejercicios prolongados o al haber sido sometido a altas temperaturas, no debemos suministrarle las típicas soluciones hidrosalinas.
Los perros son capaces de compensar un déficit hídrico de forma rápida y además, solo suele beber durante el día. Los gatos, por el contrario, se comportan en este sentido de forma totalmente diferente y se lo explicaremos en otro artículo próximamente.

Alimentos no aconsejados

Diez cosas que no debería dar de comer a sus mascotas.
Algunas mascotas se comerán casi todo lo que encuentren, por lo que los propietarios necesitan ser cuidadosos si no quieren acabar en la sala de emergencias. Las siguientes son 10 cosas malas que no debe dar a su mascota.
1. No le de huesos
Los huesos cocidos son malos para los animales! Cada año incontables números de animales acaban en la sala de urgencias porque sus dueños les han dado huesos, normalmente como premio.
El hecho es que los perros son omnívoros. Muchos perros y gatos no pueden tolerar los huesos. Los huesos pueden atravesarse o quedarse atascados en el tracto intestinal con resultados desastrosos, mismos que pueden necesitar cirugía.
También se les pueden quedar atragantados en la boca o tráquea, cosa que también es peligrosa. Todos los huesos cocidos son malos, incluidos los de pollo y ternera.
La próxima vez que quiera darle un hueso a su perro, asegúrese de que es un hueso de leche, hueso de falda que sean casi cartílagos o preparado para perros. Su perro se lo agradecerá.
2. El chocolate puede ser letal
Contiene teobromina, que causa un incremento en los latidos del corazón, estimulación del sistema nervioso central y constricción de las arterias. Los síntomas clínicos van desde el vómito, diarrea, hiperactividad, y excitabilidad, hasta el fallo cardíaco, infartos y muerte. Esto puede ocurrir tan rápido como de 4 a 6 horas tras la ingesta. El chocolate cocinado es lo peor porque contiene mayores cantidades de teobromina.
Una dosis potencialmente letal es de sólo 1 libra de chocolate para un perro de 16 libras. Si su mascota ha comido mucho chocolate, debería contactarse con su veterinario inmediatamente.
3. El alcohol es también muy malo para perros y gatos
No se necesita mucho alcohol para intoxicar a una mascota. Los animales se pondrán nerviosos y atacarán cosas, hiriéndose a sí mismos. También les causa incontinencia urinaria. En altas dosis, el alcohol suprime el sistema nervioso central, el sistema respiratorio y cardíaco, y puede llevar a la muerte.
4. La leche tampoco es buena para los animales
La mayoría son intolerantes a la lactosa y desarrollarán diarrea. Los animales además suelen carecer de la enzima que se requiere para disolver el azúcar de la leche, y esto puede causar que desarrollen vómitos, diarrea y otros síntomas gastrointestinales. Incluso si piensa que le gusta, especialmente a los gatos, sólo le podrás dar leche sin lactosa.
5. El jamón y otras carnes saladas
Son muy peligrosas para las mascotas. Además de ser altas en grasas, también son muy saladas, lo que puede causarles serios dolores de estómago o pancreatitis.
También, muchas razas de perros que comen comidas saladas pueden beber demasiada agua y desarrollar una condición crónica llamada "bloat". Esto es cuando el estómago se llena de gas y en pocas horas puede empeorar, causando que pueda morir el animal. Por favor, no le de jamón crudo ni carnes cocidas muy saladas a su mascota.
6. La cebolla es tóxica para perros y gatos
La cebolla contiene disulfidos, lo que daña los glóbulos rojos de su sangre y puede causar consecuencias fatales en animales. Se pueden volver anémicos, débiles y con problemas respiratorios.
Lo mejor que puedes hace si su mascota ha comido cebollas es llevarlo inmediatamente al veterinario. El ajo no es conveniente ni para perros ni para gatos, pero es mucho más dañino en gatos.
7. La cafeína también es mala para los animales
Contiene xanthine que, como el chocolate, estimula al sistema nervioso central y al sistema cardíaco y en pocas horas puede causar vómitos, hiperactividad, taquicardias e incluso la muerte. Asegúrese de que sus mascotas estén alejadas del desayuno.
8. Los aguacates (paltas)
También son malos para las mascotas. Primero, son muy altos en grasas y pueden causar dolores de estómago, vómitos e incluso pancreatitis. Segundo, la pulpa también es tóxica y puede quedar atascada en el tracto intestinal, pudiendo llevar a un bloqueo severo, que puede necesitar cirugía.
9. El atún para humanos es malo para los gatos
El músculo cardíaco felino requiere un aminoácido llamado taurina para mantener la fuerza y función normal. El atún normal para humanos no contiene este aminoácido, y los gatos que comen demasiado atún desarrollarán problemas de corazón. Lo ideal es darles 3 veces por semana por el aporte de Omega 3 y 6 que son necesarios para el corazón, todo en exceso es malo.
Si quiere darle a los gatos el sabor del amor que aman, simplemente asegúrese de que es atún para gatos que es el que tiene el aminoácidos taurina añadidos. Siempre que es atún o caballa a tus animales deben ser "al natural o al agua" nunca en aceite. El aceite de las latas les extrae la vitamina E.
10. Pasas y uvas
Las pasas y las uvas pueden llevar a daños de riñón en mascotas. Los perros pequeños también pueden reaccionar mal con las uvas por lo que es mejor asegurarse de que nuestros animales coman una dieta bien balanceada que esté formulada para su etapa de la vida.
Por último, no de aspirinas o paracetamol a perros y gatos, son sumamente tóxicos.
Se han visto casos muy graves en los consultorios médicos de animales que sus dueños por ignorancia o desinformación, han medicado a sus mascotas por su propia cuenta con consecuencias nefastas para los animales. Jamás mediquen por su cuenta a sus mascotas, el Ácido Acetilsalicílico es toxico para animales, los humanos somos fisiológicamente distintos a los animales.

Historia del Bull Terrier

El Bull Terrier esta basado en perros de presa y pelea, deportes (si se le puede llamar así), que fueron eliminados de Inglaterra durante el siglo XIX.
Los orígenes del Bull Terrier pueden relacionarse sin duda alguna con James Hinks, quien, después de varios años de experiencia presento a la raza en la década de 1850. Hinks paso varios años cruzando al ya extinto English White Terrier con perros bull y terrier, en un intento de crear un perro que no solo estuviera capacitado para la pelea, sino que tuviera un aspecto hermoso. Al cabo de un tiempo y posiblemente mediante el cruce con el Perdiguero de Burgos (Pointer Español), se obtuvo un luchador hermoso e imponente. El espíritu luchador hasta la muerte del Bull Terrier, lo convirtió en todo un campeón de las pistas de lucha venciendo hasta perros superiores en tamaño.
El Bull Terrier también era bueno cazando ratas, otro deporte muy popular en Inglaterra. El Bull Terrier era el que tenia el mejor record en tan singular deporte.
Aunque Hinks estaba muy orgulloso del éxito de su creación para la lucha, estaba mas interesado en los eventos de belleza que estaban comenzando a rivalizar con las peleas de perros. Hacia el año 1860 los jueces empezaron a demostrar cierta debilidad con el Bull Terrier completamente blanco. Hinks empezó a aparear machos y hembras blancas e introduciendo posiblemente, genética Dálmata. Hinks consiguió Bull Terriers blancos, hoy en día hay de dos clases: blancos y de color.
Esta raza, que es valiente, fuerte, leal y amistosa se les conoció con el nombre de Caballero Blanco.
Los éxitos en los certamen caninos fueron una bendición, ya que la raza fue siendo mas conocida como perro de compañía que de pelea lo que dio como resultado el Bull Terrier actual un animal pacífico y un buen perro de compañía.
En la actualidad la raza bull terrier es un perro que tanto por su temperamento, como por personas que sin escrúpulos que aun siguen haciéndoles luchar, o bien no los educaron correctamente, se están considerando como perros peligrosos. Pero nosotros podemos decir que es un perro que educándolo correctamente y ofreciendole cariño, se puede conseguir un perro manso, jugueton, sociable, guardian del hogar y un gran animal de compañia.
El actual Bull Terrier no tiene nada que ver con el primer Bull Terrier del siglo XIX.

¡VAMOS A ENCONTRAR A NUESTRO PERRO!

La actitud que todo amante de los perros debe mantener cuando decide ser acompañado parte de su vida por "el mejor amigo del hombre", suscita algunas preguntas del todo necesarias y de entre las cuales, vamos a responder aquellas que son imprescindibles para establecer una adecuada y larga convivencia con nuestro amigo.LA RAZA ¿Qué tamaño?El tamaño del perro que seleccionemos debería regirse por los siguientes criterios:Entorno.- En un apartamento de la gran ciudad, el tamaño se hará notar en el espacio vital que permanentemente ocupa el perro, es decir, tanto en casa, como en el ascensor , en las aceras o en medios de transporte. Incluso el tamaño de las heces, viene condicionados por su corpulencia.Dedicación.- Si bien, generalmente un perro de tamaño pequeño es notablemente más activo que el de talla grande, esta misma condición, es la que obliga al dueño del perro de talla grande a efectuar largos paseos que mantengan a su perro en perfectas condiciones físicas y psíquicas."Una correcta relación del perro con el entorno del que percibe olores, ruidos y demás sensaciones, unido a la debida expansión física, suponen una inagotable fuente de equilibrio psíquico en el perro".Respecto al guía.- El peso ideal del perro, debe corresponderse con la mitad del peso de la persona que habitualmente lo manipula. Esta regla deberíamos aplicarla en los perros que guiaremos con la correa, no así lógicamente en aquellos que estarán en una finca, libres y a los cuales ocasionalmente tendremos que retener.¿Qué pelo?Pelo largo.- Ideal para perros que pasarán la mayor parte del tiempo en el exterior. Este tipo de pelo les protege tanto del frío como del calor. Para lugares inclementes, húmedos, fríos o lluviosos deberán contar con subpelo.El pelo interior o subpelo, garantiza que la humedad no llegue a tomar contacto con la piel del perro. De esta forma aunque el pelo exterior esté mojado, el perro se encuentra "seco". Así, se evitan enfriamientos e incluso congelaciones.Algunos clubes de raza, como el del Pastor Alemán, han establecido en el estándar de la raza, que los individuos con el pelo largo(tendentes a la ausencia del subpelo) no podrán constar en el libro de orígenes(no obtendrán la documentación o pedigrí).El pelo largo necesita ser cepillado con frecuencia y en periodos de muda, a diario.Un inconveniente añadido y no exento de importancia, es la notable presencia de este tipo de pelo en el momento de la muda, esparciéndose por todas partes, casa, coche, jardín y demás espacios transitados por el perro. No es que con el pelo corto deje de ocurrir esto, sino que en el pelo largo se nota más.Pelo corto.- Es el adecuado para perros que vivirán en el interior y no estarán expuestos más de lo razonable a las inclemencias del tiempo. Entrar a casa o al coche con un perro de pelo corto tras un paseo bajo la lluvia, nada tiene que ver con las consecuencias que acarrea hacerlo con otro de pelo largo.Por otra parte, los cuidados se reducen notablemente y por tanto el tiempo que tenemos que dedicar a esta tarea.¿Qué relación tendrá con el grupo?El tiempo que le podamos dedicar a nuestro amigo debe contar en el momento de elegir. Cada individuo tiene unas necesidades distintas pero nos atreveremos a tomar la referencia de la raza a modo orientativo.Razas de pastoreo y caza.- Muy adaptables a cualquier situación ambiental y altamente gregarias, por tanto individuos muy necesitados de integración al grupo(familiar o de otros perros) Ideales para dueños que puedan compartir mucho tiempo con su perro.Razas de defensa.- Nos referiremos a aquellas como Bóxer, Dobermann, Pastor Alemán, Pastor Belga u otras de similares características que han sido seleccionados por sus cualidades como acompañantes y protectores del guía. Excluimos a los perros de guarda tipo moloso y que en muchos casos manifiestan una escasa actividad mental.Los individuos de estas razas suelen ser muy gregarios, pero su alta actividad psíquica e instinto de protección permite que puedan pasar largos periodos en el exterior observando lo que ocurre a su alrededor. No obstante, necesitan pasear y jugar con su amo siempre que se presente la oportunidad. Desaconsejados rotundamente como perros de chenil o perrera.Los perros con una elevada actividad psíquica, como las razas mencionadas, acusan sensiblemente el confinamiento en perreras de dimensiones reducidas, sin observación de un entorno animado o sin expectativas de actividad con su dueño o grupo. Se llegan a producir conductas anómalas, estereotipadas o comportamientos neuróticos.Razas de Guarda.- Consideramos en este apartado a los individuos de las razas cuya selección se encamina a la vigilancia de recintos o bienes. Molosos, molosoides y aquellos que por sus cualidades de aspecto disuasorio, tamaño o capacidad han sido seleccionados para estos fines. Incluiremos en este apartado, Rottweiler, Mastines y Dogos.Salvo excepciones, suelen ser perros con una escasa actividad mental. Esto añadido a su independencia del grupo les convierte en adaptados para vivir en relativa soledad.A ciertas razas se les añade la característica "de cadena", llegando en algunos casos como en el del mastín Napolitano a tener un cuerpo aparentemente adaptado a esta circunstancia.¿Necesitamos alguna utilidad canina?Ciertamente en el caso de necesitar que el perro que buscamos pueda desarrollar alguna tarea, tendremos en cuenta que sea lo más adaptado posible al fin que buscamos.Obviamos la utilidad de compañía, porque aun siendo importantísima, el perro, salvo raras excepciones, es intrínsecamente gregario y por tanto necesitado de estar integrado en un grupo.Utilidad de guarda o defensa.- Escogeremos individuos de líneas de cría seleccionadas para este fin. De manera que el criador solo tenga como criterio añadido al de buena salud el de escoger como reproductores a los individuos mejor adaptados a la utilidad.La regla de oro en la crianza de perros de utilidad es la de priorizar sin concesiones y en el siguiente orden:
SALUD
CARÁCTER(cualidades psíquicas para la utilidad)
BELLEZA Si alteramos este orden, aumentamos los obstáculos para conseguir el fin, siendo posible la invalidez para el mismo e incluso alteraciones indeseadas del comportamiento.Utilidad Terapéutica.- En ocasiones, es necesario que un perro se convierta en el desencadenante de un cambio de actitud en una persona o grupo de personas.Es en ancianos, niños con problemas de lenguaje o comunicación, limitaciones psíquicas o físicas, enfermos terminales, presos, personas que viven aisladas, etc. donde el perro ha demostrado su validez terapéutica.La adquisición de un perro de terapias debe ir avalada por un comportamiento equilibrado y nada dominante hacia el humano. Con preferencia a perros de un alto instinto lúdico. Por supuesto es conveniente aconsejarse por profesionales en el ámbito sanitario y canino. Existen asociaciones en varios países del mundo, que pueden prestar una valiosa colaboración en determinados casos terapéuticos. ¿Cohabitará con niños?Los niños representan para un perro mentalmente sano el equivalente al cachorro. Por esta comparativa, el cachorro es un elemento con ciertos privilegios de los que relacionamos a continuación los más importantes.
Cualquier actividad molesta del cachorro para con el adulto es permitida. A lo sumo, se puede corregir por este pero sin causar daño físico.
La alimentación por la regurgitación es un acto reflejo que el cachorro despierta en el adulto mediante el lamido en la comisura de los labios.
El adulto debe respetar la distancia de seguridad mientras el cachorro se alimenta. Estos son algunos de los privilegios del cachorro respecto al resto de adultos. Queremos señalarlos a modo de ejemplo y a fin de establecer una reflexión sobre el comportamiento de algunos perros adultos hacia los niños.El perro adulto que no tolera a los niños en general o que incluso los agrede, presenta una disfunción tal que debe hacer al propietario considerar el sacrificio del animal.Aunque esto sea terrible, no podemos dar ninguna oportunidad a que ocurra un accidente, que en algunos casos puede significar la muerte del niño.Nada tiene que ver en las agresiones a niños, que el perro sea agresivo en otros aspectos. Por ejemplo, los perros policía o de seguridad son seleccionados entre individuos tolerantes con los niños. Esto es un indicativo de estabilidad y seguridad en el carácter. Casi siempre, el perro que muerde a un niño, no es capaz de hacerlo a un adulto que se le enfrenta. Por tanto cuando el perro conviva con niños, intentaremos seleccionarlo entre individuos que sean tolerantes con los cachorros o que no sean asustadizos con los humanos.Cuanto más seguro y estable sea el carácter del perro, tantas más garantías de éxito en la convivencia con los niños.¿Vivirá con otros perros?Si el perro que vamos a adquirir tiene que convivir con otros perros, tendremos en cuenta tres normas básicas.
Las razas que tienen un alto instinto gregario y jerárquico son las idóneas.
Si es posible haremos convivir individuos de distinto sexo, pero en caso de tener establecido un grupo de elementos del mismo sexo, integraremos otro similar. Hacerlo con un elemento de distinto sexo significaría probables disputas.
Las razas de lucha, de presa y molosoides suelen tener pocas inhibiciones instintivas cuando disputan con otros individuos del mismo sexo, por lo que es fácil que en caso de peleas estas sean dramáticas. Las inhibiciones son los frenos que el instinto o el aprendizaje pone a determinadas conductas. Las inhibiciones instintivas son un freno mucho más fuerte que las aprendidas. Por ejemplo, el macho no muerde a la hembra por una inhibición instintiva.LA EDAD¿Adquirir un cachorro o un adulto?La opción mayoritaria de los que deciden adquirir un perro es la de hacerse con un cachorro y suele estar motivada por la creencia que supone al perro adulto como más difícil de entender y de adaptarse a su nuevo entorno.Adquirir un cachorrito tiene la ventaja de participar en el desarrollo de nuestro amigo y disfrutar de periodos de su vida que realmente son una delicia. Por el contrario, se corren riesgos en cuanto a desarrollo psíquico y físico que habrá que esperar hasta saber en que termina.Pero siendo más fácil la manipulación de un cachorro, elegir un perro joven o adulto no tiene que representar ningún problema. Los resultados de su evolución están a la vista.El perro adulto necesita una semana aproximadamente para adaptarse a su nuevo entorno. Su espíritu jerárquico y gregario le harán encontrar rápidamente a su líder y al resto del grupo en su caso.Es conveniente que no descartemos la opción del perro adulto. Hay personas que no les quedan más remedio que deshacerse de su perro y este puede ser el que necesitamos.corregida una redundancia.¿UN MACHO?Si ya tenemos claro la utilidad que le vamos a dar a nuestro animal, veamos con carácter general lo que diferencia a los dos sexos de la especie.Los machos son más independientes, más tercos en la educación y, debido a la función competitiva, mas agresivos que las hembras. Pensemos que la hormona de la masculinidad es, a la vez, la de la agresividad. Este carácter está plenamente justificado y cuando se trata de disminuir por medios clínicos, los resultados obtenidos aparte de antinaturales, nunca han sido fiables. Por otro lado, los machos son más aptos para la defensa por el dimorfismo sexual de especie. Nos referimos que son, casi siempre, más grandes y fuertes que la hembra y, debido a los caracteres sexuales secundarios, superiores en el efecto disuasorio.Desaconsejamos por tanto, la adquisición de un macho de Pastor alemán a una mujer de poco carácter. El ser mujer implica un nivel menor de testosterona en sangre (hormona masculina) y tener poco carácter presupone una falta de liderazgo en las futuras relaciones con su machito dominante que admira y teme la Testosterona a la vez que demanda un puño de acero en guante de seda.Nuestros perros no son machistas ni feministas y solo entienden de este concepto humano, lo que su biología les indica que es lo adecuado.¿MEJOR UNA HEMBRA?Las hembras son más propensas a lo que se ha dado en llamar embarazo sicológico que no son más que manías maternales en especímenes solterones. También, al ser más dependientes, sufren más la ansiedad por separación (que veremos en otro capítulo). Suelen ocasionar problemas de higiene cuando les viene el ciclo estral o período y, por último, son más destructivas.Por el contrario, cuidan mejor que los machos de los cachorros humanos, son menos independientes y más gregarias que aquellos, tienden a escaparse menos y son aptas para jerarquizarse con casi todos los dueños. La pregunta obligada es ¿Por qué todas estas diferencias?.Realmente hay muchas más que iremos desgranando a lo largo del libro y en los capítulos de conductas. Para ello debemos tener claros una serie de conceptos que poco a poco veremos más adelante.DONDE ADQUIRIRLO¿En una tienda?En una tienda de animales de compañía se pueden encontrar perros disponibles in situ o pueden gestionar la localización del mismo. En caso de elegir este camino, debemos exigir que el perro sea revisado por un veterinario que certifique su estado sanitario. También solicitaremos un contrato de compra con las garantías anunciadas por el vendedor, que se acompañará de la correspondiente factura legal.Si se trata de un perro con derecho a pedigrí y si aún no está disponible, debe constar en el contrato este derecho, ya que el coste del animal será superior.El pedigrí es la garantía de procedencia del perro. Documento emitido por una asociación encargada por el ministerio de agricultura de la llevanza de este registro. Constan los datos del criador, los del nacimiento de la camada del individuo, los de sus antepasados y los del propietario. El criador notifica el nacimiento de una camada y solicita a la asociación canina el resguardo correspondiente por cada cachorro de la misma. Cuando vende un cachorro se lo entrega al nuevo dueño, firmando la cesión en el reverso del resguardo. El nuevo propietario puede solicitar entonces el pedigrí a la mencionada asociación, previo pago de una nada despreciable cantidad económica.Debemos saber que por lo general encontraremos cachorros procedentes de camadas de particulares o de criadores que destinan a la tienda los elementos menos atractivos de las camadas. ¿A un criador especializado?Si hemos optado por una raza determinada, otro de los caminos a seguir es la visita al criador especializado. Exigiremos el contrato de adquisición y la factura de compra en el caso de un profesional. Es importante que tengamos referencias. Si no es posible obtenerlas, debemos interesarnos por la salud y el carácter de los perros. En el caso de razas de utilidad, sus líneas de cría deben estar orientadas a alguna tarea práctica o deporte canino. Desconfiemos de los criadores demasiado preocupados en la estética del perro y en los competidores muy laureados en exposiciones de cría. Estos solo tendrán prioridad por la belleza lo que facilita que tengan sus perreras llenas de elementos con problemas físicos y sensiblemente disminuidos psíquicamente.Si buscamos un perro de pastoreo, comprémoslo a un pastor si es posible. El mayor desecho de cualquiera de sus camadas es infinitamente de mayor calidad que el de un criador comercial.Del mismo modo, si elegimos un perro de caza, busquemos a un cazador que críe con sus perros. Tanto el vigilante de seguridad, el pastor o el cazador, si crían perros para su trabajo, son los realmente más especializados. ¿En un albergue de perros abandonados?Son numerosos los perros abandonados por sus dueños y unidos a los que se extravían acaban recogidos en perreras municipales o albergues de perros abandonados. Adoptar uno de estos perros puede ser la solución a la búsqueda, sobre todo si lo que pretendemos es encontrar un compañero y no tenemos pretensiones de otra utilidad. Habrá que observar detenidamente al perro elegido porque en ocasiones los perros problemáticos son abandonados por sus dueños. Para conocerlo mejor es conveniente preguntar al cuidador directo.

EL PERRO URBANO

Cuando el hombre encontró al perro, hace miles de años, vivía en palafitos, en terrenos tuberosos y con abundante caza. Ambos se asociaron por mutua conveniencia y hasta nuestros días esta relación de utilidad se ha mantenido e incluso incrementado.
A finales de este siglo XX la mayor parte de la población humana habita en pueblos, ciudades o grandes urbes y como es lógico, su mejor amigo, el perro, haciendo un alarde de adaptación al medio, continua a su lado porque el hombre así lo quiere: ¿por cuestiones de moda?, ¿por necesidad?.
La realidad es que según estadísticas se calcula una población de cánidos en España cercana a los 4 millones, es decir, un can cada diez españoles. Y si la mayoría de los españoles vivimos en zonas urbanas la mayoría de nuestros perros comparten este entorno.
INTEGRACION DEL PERRO EN EL AMBITO URBANO.
La relación de convivencia hombre - perro, en este ámbito urbano, es compleja por diversos motivos: por una parte los problemas comportamentales y educacionales del can en nuestra propia casa y por otra los problemas con el medio urbano.
No obstante la integración del perro en este ambiente es factible y a pesar de algunos inconvenientes, exitosa para la mayoría de las personas, independientemente de la raza de su can.Por experiencia, en nuestro Centro de Enseñanza y Comportamiento Canino, sabemos qué tipo de consultas son las más comunes y las que más preocupan a los poseedores de perros: - Problemas en casa: Necesidades fisiológicas, ladrar, romper, relaciones con la familia y con el vecindario.
- Problemas en la calle: Caminar con el perro atado, ensuciar las aceras y ciertas conductas indeseables.
- Problemas en los parques, con el perro libre de la correa: Acudir a la llamada del guía, relaciones con sus congéneres etc.
- Ejercicios para su correcto desarrollo físico.
- Aprovechamiento de sus cualidades innatas.
- Prácticas polivalentes para el perro urbano y el deportivo.
NUESTRA CAPACIDAD EDUCADORA.
La solución a estas cuestiones depende de la conocimientos en psicología canina que posea el propietario del perro y del adecuado diseño de parques y jardines de nuestras ciudades.Nuestro sentido común es insuficiente para comprender y adaptar a nuestro amigo de cuatro patas al medio urbano, por su complejidad. Es necesario aumentar nuestros conocimientos: ¿Cuál es su perfil canino? Es decir, ¿cuáles son las características esenciales que diferencia a tal o cual raza?.
¿Cómo ayudar al perro en su proceso educativo de adaptación?.
¿Qué tipo de premios y castigos son los adecuados y éticos de acuerdo con nuestra forma de querer al nuevo miembro de la familia?.
Nuestros conocimientos y prácticas, en materia de capacidad educadora, son mínimos ya que no sé por qué motivo se pretende que el ejemplo que nos dan nuestros padres sea suficiente.
El proceso educativo del hombre y las modificaciones de su conducta transcurre en diversos estadios ya que es influido por el núcleo paterno-materno en su niñez, por la escuela en su juventud, por su propia familia cuando se casa y por la sociedad durante toda su vida. En el caso del perro la situación es muy distinta ya que toda su vida, durante su etapa de cachorro, joven y adulta transcurre en el mismo entorno familiar. Esto conlleva una problemática en lo referente a su posición jerárquica dentro del núcleo familiar siendo de cachorro uno más de nuestros hijos para convertirse después, en un par de años, un miembro adulto más en nuestra casa.
El perro urbano, es obvio que necesita una educación, pero ¿terminan aquí sus "estudios escolares"?: No.
Al igual que sucede con nuestros hijos es conveniente una formación:¿A qué nivel? Depende de su raza, capacidades y nuestras ganas. Si queremos que nuestro perro sea DIESTRO en alguna actividad ya sea deportiva (pruebas de trabajo, agilidad, caza...), de utilidad (rescate, lazarillo, ayuda a discapacitados...), de selección canina (exposiciones, test de carácter...) tendremos que adiestrarlo. Pero antes tendremos que EDUCARLE.
LOS PARQUES Y JARDINES DE LAS CIUDADES.
El perro urbano también necesita en medio ambiente adecuado aunque con tener un techo, nuestra casa, y una relación, nuestro afecto, su vida tiene calidez. Pero para un correcto desarrollo físico y psíquico necesita salir al exterior, estirar las piernas, tomar el sol y comunicarse con sus congéneres.
¿Dónde? Personalmente cuando he ido a pasear al parque con mi perro he tropezado con la policía municipal, cuando he ido al río con el guarda forestal (les avala la legislación) y cuando he ido a preguntar me han enviado a la Luna o a Marte.
¿Cómo es posible que nuestros parques públicos adolezcan de unos servicios mínimos para nuestros perros urbanos?.
¡Cómo es posible que un parque consista en una serie de pasillos formados por grandes áreas plantadas de árboles rodeados de seto y no se pueda soltar a nuestros perros en algunos de estos recintos¡
Máxime, cuando alguno de estos parques tienen una superficie mayor de 50.000 m2 como sucede en la población de Alzira (Valencia) y se precie el ayuntamiento de tener un parque con un diseño a nivel europeo. Otros parques como los de Guadasuar (Vcia) están rodeados de placas señalizadoras prohibiendo la entrada de perros en dichas zonas. Otros ayuntamientos. como el de Sueca (Vcia), han improvisado wateres para perros en determinadas esquinas, sin criterio.Como resumen podemos concluir repitiendo que a los amigos perro urbano les falta formación y a nuestros técnicos en urbanismo información.

EL MANOSEO

El autor publica este artículo en Julio del 93 en la Revista de la Canina de Valencia, como fruto de las experiencias acumuladas por los trabajos en educación canina realizada sobre cachorros de todas las razas, entre los 2 y los 6 meses de edad. Dichas practicas se realizaron en primer lugar por mí y a continuación por su propietario una vez a la semana en mi consulta y el resto de los días de la semana por el mismo y en su propia casa. En la actualidad, son más de 1000 perros a los que se les ha practicado el MANOSEO, en el Centro de Educación Canina de Misana y otros tantos los guías que han aprendido a realizar de forma rutinaria dicha actividad. El seguimiento de la conducta del perro, ante las manipulaciones, ha sido comprobada hasta que el perro ha terminado sus enseñanzas en la escuela, un porcentaje elevado a los 14 meses y una minoría a los 24 meses de edad, presentando siempre una alta estabilidad emocional y un adecuado comportamiento. No he tenido constancia de que ninguno de los ejemplares presentara problemas de conducta en el veterinario o exposiciones, a lo largo de toda su vida.
CONSIDERACIONES INICIALES
Si bien cada perro es único en su forma de ser, cada sexo tiene sus diferencias, y en cada edad tiende a presentar unas determinadas conductas, sobre todo en su etapa de cachorro, cada raza determina, en rasgos generales unas determinadas tendencias. Por ejemplo, los propietarios de un Rottweiler de exposición son conocedores de su reticencia a dejarse ver los dientes ante el Juez de Belleza. Así como los Belgas evitan el toqueteo de sus cataplines o de su rabo. Lo cual no quiere decir que existan Rottis que no se dejen tocar sus atributos masculinos así como pueden existir Belgas que no se dejen ver la boca.
En general a ningún perro le gusta que le exploren o a no ser que haya aprendido mediante refuerzos positivos a sufrir una invasión de ciertas zonas de su cuerpo.
LA INNOVACION
¿Qué se puede aportar al mundo del perro que no haya sido ya utilizado? Poco, pero muy interesante y útil. Vamos a ver: todo el mundo toca a su perro, le acaricia pero de poco le sirve cuando intenta que se esté quieto mientras le pone unas gotas de colirio en sus ojos. Todos los expositores veteranos tienen unos perros súper estáticos mientras están en el ring o en la mesa de peluquería, pero emocionalmente sosos o apagados. Incluso los etólogos clínicos se han dado cuanta de la utilidad de estas prácticas recomendándolas desde la más temprana edad del perro, pero se han olvidado de una cosa muy importante: del PREMIO. Quizá consideren que la voz sosegada del dueño, las caricias y el empezar la habituación en el 2º mes de la vida del perro son motivo de éxito. Aunque según mi experiencia el éxito es mayor cuanto mayor sea la recompensa y el premio que vamos a utilizar es el refuerzo un instinto primario, de supervivencia: EL AGUA.
OBJETIVO
- Habituación del perro a ser tocado por su dueño.
- Mantener el estado emocional estable a pesar de las manipulaciones que realicemos en su cuerpo.
VENTAJAS
- Estabilidad emocional en su presentación en Exposiciones Caninas y Test de carácter o socialización.
- Facilita la labor en la clínica veterinaria (exploraciones, curas, vacunas...) y en la peluquería canina.
- Garantiza la dominancia del dueño sobre el perro sin ningún traumatismo para nuestro amigo de 4 patas, difiriendo sobre la producida por la técnica del Dominance-Down.
EDAD DE INICIO
Al principio de la etapa de socialización, en la mayoría de las razas caninas, a partir del día 19º de su nacimiento. Lo normal es empezar las prácticas al adquirir el cachorro, NUNCA en la 9ª semana de vida.
ESTABILIDAD EMOCIONAL SEGÚN SU PERFIL CANINO
Coincidiendo con las observaciones de Daniel F. Tortora, especialista en conducta, clasifico la estabilidad emocional de diversas razas en:
Muy Inestables: Cocker Spaniel, Doberman, Bobtail.
Inestables: Afgano, Pastores Belgas, Collie, Teckel, Pastor Alemán, Caniche Enano, Yorshire Terrier, Podenco Ibincenco, Perro de Aguas Español, Pequinés, Gos d'Atura.Estables: Akita Inu, Airedele Terrier, Alaska Malamute, Beagle, Boyero de Flandes, Boxer, Chow Chow, Fox Terrier, Pointer, Labrador Retriever, Rottweiler, Schnauzer, Siberian Husky, Perdiguero de Burgos.
Muy Estables: Basset Hound, Gran Danés, Mastín Español, Mastín de los Pirineos, Setters, Bulldog Inglés.
¿DÓNDE REALIZAREMOS EL MANOSEO?
- Hasta los 5 meses subiremos al cachorro en una mesa estable, desaconsejamos los bancos donde pueda refugiarse en la pared. Para jóvenes y adultos que se inicien en este ejercicio utilizar una sólida mesa.
- Realizaremos las prácticas en una habitación tranquila y sin visitas.
- A partir de los 6 meses en cualquier lugar con distracciones o en el club de trabajo.
¿CUÁNDO REALIZAREMOS EL MANOSEO?
Hasta el 5º mes:
- Después de mantener una relación agradable con el cachorro y haberle "quemado" parte de su exceso de energía, mediante los juegos de pelotas o mordedores.
- Al volver después de un largo paseo por el campo. ¡Cuidado con el agua!
Para jóvenes y adultos novicios: Tras las practicas de trabajo, paseo en bicicleta, después de un fuerte ejercicio físico.
¿CÓMO REALIZAREMOS EL MANOSEO?
Subiremos en brazos al perro a la mesa, capturándole, y no llamándole para que venga. Le daremos un mini trago de agua y le diremos: Prou (en valenciano: bastante) que te la terminarás, el agua no, la sed. Retirándole a continuación el bebedero que lo dejaremos en un banco adjunto y no encima de la mesa.
Empezamos el manoseo en el siguiente orden:
1º. Los ojos: Cogiendo su cabeza como si fuera un sándwich formado por nuestras manos dejando libres nuestros 2 pulgares. Con habilidad si hace falta nos podemos auxiliar de la correa o el collar. Bajar el párpado inferior, si la coloración de la mucosa es rosada o roja el perro está normal, si es blanca o pálida puede sufrir algún tipo de anemia. Al comprar el perro observar si existe entropión (pestañas que contactan con el globo ocular) o ectropión (caso inverso). En las primeras prácticas no quitarle ni las legañas.
2º Las orejas: Reteniéndole de la parte inferior del cuello con una mano, con la otra observaremos cada una de las orejas. Tener la precaución que aconsejan los otorrinos: no meter en el interior de la oreja nada más pequeño que el codo. Podemos limpiar el pabellón externo de la oreja, por su cara interna, con toallitas que existen ex profeso en el mercado. No utilizar bastoncillos. En las primeras prácticas no arrancar los pelos internos, si nuestro perro es del colectivo de razas en que es aconsejable realizar dicha función.
3º Los dientes: Sujetar con firmeza con una de nuestras manos, la piel de la parte inferior del cuello, en el punto donde debajo de la boca del perro se inicia la papada. Con la otra mano, no abrirle la boca, sino levantar los belfos laterales uno a uno y por último la zona de la trufa para ver sus incisivos. CUIDADO en no ejercer presiones en la nariz, aplastarle los pelos del bigote produce dolor sobre todo en las razas de perros que tienen cerdas duras. En las primeras prácticas no limpiarle la suciedad de su trufa, de restos de comida o tierra.
4º El cuerpo: El cachorro debe permanecer de pié sobre sus cuatro patas, si se sienta, debemos colocar una mano en su ingle, frontalmente, de manera que la palma de nuestro mano contacte con la cara interna su muslo, de inmediato se levantará, con la mano que nos queda libre acariciarle el dorso, grupa, flancos y rabo. Después pasarle una carda o manopla de goma sin grandes afanes de limpieza.
5º Las manos: Los perros no tienen clavícula y sus brazos entroncan con su caja torácica mediante tendones, es lógico que recelen de que se les provoque alguna lesión. Si toleran que levantemos y doblemos sus metacarpos, muñecas hacia atrás para explorar sus membranas interdigitales, buscando espigas del campo, garrapatas. Después de las prácticas iniciales podremos aplicar ceras endurecedoras o aceites para curar sus grietas.
6º Los pies: Traccionar sus piernas hacia atrás podremos observar las almohadillas plantares, al tocarle con nuestros dedos produciremos cosquillas, algunos ejemplares dan coces.
7º El rabo: Es la prolongación de la columna vertebral, por lo tanto una zona sensible, debe tratarse con delicadeza. No levantar en exceso, duele. Dialogar con el Dr.Veterinario para evitar introduzca el termómetro para comprobar su temperatura o para comprobar si tiene parásitos, a no ser que sea imprescindible. Es probable que al observar la estabilidad de nuestro cachorro opte de realizar exploraciones excesivas.
8º Los testículos: En el 6º mes de vida del cachorro, deben de haber descendido hasta el escroto, comprobar si hay dos. Practicar a encontrarlos mediante la utilización del dedo pulgar, índice y corazón. No hace falta verlos, con tocarlos con rapidez y suavidad, sobra.
9º El spray: En las primeras sesiones utilizar un pulverizador, después pasaremos al uso del ruidoso spray. No pulverizar ni en la cabeza ni en el pecho. Cepillar todo su cuerpo con una carda suave, primero por el envés y después por la parte correcta de la carda, donde están las púas.
10º El premio: Utilizar un premio al que ningún perro puede renunciar: EL AGUA. Distribuirla puntualmente: Primero al subirle a la mesa y después de cada manipulación de cada una de las partes del cuerpo darle un pequeño sorbo de agua, de forma que al perro le quede sed, que podrá saciar cuando estemos realizando la última intervención. mientras pulverizamos y cepillamos su cuerpo. El hecho de satisfacer la necesidad de beber permite al perro deducir que el manoseo es positivo y agradable, incentivándole a colaborar en dicha actividad.
OBSERVACIONES
- A las dos semanas de prácticas, antes de bajarle de la mesa y después del último trago de agua, colocarle en "stat" unos 5 segundos, bajarle en brazos y mostrarle nuestra alegría palmoteando nuestras manos.
- Si el cachorro se resiste a ser manipulado, hay que fatigarle más en los juegos o paseos y realizar el manoseo con mayor brevedad "mordiéndole" con nuestra mano izquierda, debajo del cuello, en la parte alta de la papada. Cuando cesen sus devaneos darle un trago de agua, acariciarle cualquier parte del cuerpo no conflictiva y paciencia. El cachorro necesita comprobar que no vamos a causarle ningún daño. No gritarle NUNCA.
-No practicar el manoseo mientras come.
- Todos los objetos que utilicemos en la manipulación le serán presentados con anterioridad para que los huela.
- Al principio ser breves, podemos realizar el manoseo en tres minutos.
- No es conveniente practicar los ejercicios en la novena semana de vida del cachorro, nuestro can necesita disputar su jerarquía, si le vencemos quedará muy hundido moralmente y si perdemos tendremos que cambiar de lugar de prácticas, incluso necesitaremos de alguien que nos ayude.
- Si a nuestro perro no se le ha manoseado , empezar los ejercicios como si fuera un cachorro, subirle a la mesa un rato, darle de beber y empezar desde el principio, hasta realizar las prácticas en el suelo.
- Al terminar la sesión del manoseo, comprobar en que medida le ha afectado a nuestro amigo, el realizarle este ejercicio: si quiere jugar con nosotros podremos aumentar las manipulaciones, si por el contrario nos huye y se esconde dejarle solo. Procurar que en la siguiente sesión que tenga una mayor sed, mayor fatiga y más breves en el manoseo.
- La primera práctica vale por un millón, luego mentalizarse que vais a trabajar, tener todos los preparativos y actuar metódicamente. Suerte.

ETOLOGÍA APLICADA. LAS FOBIAS EN LA ESPECIE CANINA

El problema que origina para un dueño la fobia de su perro frente a un o unos estímulos determinados, es uno de los mas graves con los que debe convivir tanto él como el animal.
Hace pocos días leía en una revista de divulgación canina que este problema tenía muy fácil solución tanto si se cogía a tiempo como si se trataba de corregir en un estadío vital avanzado del perro. Con el debido respeto que me merece la autora del artículo, debo decir que difiero sustancialmente en sus conclusiones. La fobia tiene mal diagnóstico y es difícil, cuando no imposible, su tratamiento. Hace pocos meses trabajé con un perro, destinado al deporte, que presentaba fobias generalizadas hacia un amplio abanico de estímulos. Se pudieron paliar algunas e incluso, erradicar otras pero, el consejo final que tuve que dar al dueño, fue que no llevara al perro a determinadas pruebas o que adquiriese otro para ellas.
Se puede definir la fobia como una respuesta de miedo excesiva y persistente frente a un estímulo determinado. Puede ir acompañada de ansiedad por separación del dominante, conducta destructiva, agresividad por miedo e incluso, autolesión. No podemos afirmar que el componente racial sea determinante pero sí que el genético, la experiencia previa o el índice de percepción individual influyen de manera notable en la licitación de estas conductas asociadas al miedo.
También y, en el contexto de licitación, vemos perros que solo muestran fobia a ruidos asociados con desastres naturales (relámpago, caída de rayo, truenos o cohetes) y otros que lo hacen hasta en presencia de un estímulo novedoso como la apertura brusca de un paraguas o la caída de un objeto. Otra distinción importante es la ontológica, es decir, hay animales que presentan estas conductas desde el periodo crítico de socialización y otros que comienzan a licitarlas a los dos años o tres años de vida.
Antes de analizar los distintos tipos de fobias – imnatas o adquiridas- veamos el enfoque etológico del problema para tratar de comprender su naturaleza.
Como sabemos, el individuo más apto (en libertad) sería el que mejor evitara la depredación, tuviese mas acceso a las fuentes de recurso y obtuviera mas éxito reproductor. Nuestros perros, con solo un periodo de domesticación de dieciseismil años, no pueden haber olvidado, en su mensaje genético, que el desastre natural los afecta sobremanera en sus factores de supervivencia. Tampoco el que una experiencia novedosa puede ser la responsable de su extinción ya que no estarían capacitados para resolverla. Tampoco habrán olvidado que una comunicación agonistica intensa por parte de un dominante, puede ser un aviso de muerte inmediata.
Realmente no debe sorprendernos el que el 20% de nuestros perros domésticos sufran fobias si tenemos en cuenta el enfoque anterior. Pero tampoco soluciona nada, al dueño del perro, el que el concepto de fobia pueda ser asimilado a una conducta adaptativa en su propia evolución. Veamos pues los dos tipos de fobias y su forma de paliarlas o erradicarlas.
La fobia imnata puede ser considerada como una conducta heredada del carácter miedo. Hará su aparición cuando el proceso de socialización esté tocando a su fin y se manifestará frente a varios estímulos. Es la más peligrosa por su capacidad de extrapolarse a otros estímulos posteriores que aparecerán en la vida del animal. El perro que presente esta elevada emocionalidad jamás será apto para pruebas deportivas y mucho menos para ser adiestrado en defensa. En un futuro, puede ser responsable de lesiones a personas o protagonista de conductas aberrantes. Por supuesto, a tenor de su raza, puede ser utilizado como animal de compañía pero siempre con las limitaciones propias del individuo. Por otra parte, y debido a la condición de especie altricial del perro, esta fobia puede ser controlada por medio de manipulaciones neonatales y condicionamiento operante. Entre los adiestradores es muy normal buscar el carácter temple -que no es más que la ausencia de fobias - entre los cachorros de dos meses de una camada, para adoptar un ejemplar de trabajo.
Cuando la fobia se manifiesta en el periodo de madurez del animal y solo frente a un determinado estímulo, debemos sospechar que el perro ha sufrido un proceso de sensibilización. Si unimos, en el tiempo, un estímulo aversivo (daño físico o frustración) con otro neutro (cohete) el animal tenderá a licitar conductas de miedo o agresivas con la sola presencia del neutro. La mayor parte de las veces, nosotros somos los responsables de las sensibilizaciones de nuestros perros y otras pueden ser personas ajenas a la familia las que pueden causar fobias con o sin intención. En Sevilla vi un ejemplar de trabajo que licitaba conducta fóbica hacia su jaula sin llegar a averiguar quien había sensibilizado al perro.
El tratamiento de esta clase de fobias se basa en el condicionamiento operante. Cuando la habituación (proceso contrario a la sensibilización) se prevé lenta, debemos recurrir a la administración de fármacos siendo en estos casos, imprescindible la actuación conjunta del veterinario y el especialista en conducta. Con los tranquilizantes conseguiremos que la respuesta de miedo sea menos intensa y podremos utilizar la exposición gradual al estímulo como base del tratamiento. Premiaremos cualquier conducta de tranquilidad mientras aumentamos la exposición. El guía debe permanecer tranquilo frente al estímulo y nunca recurrir al castigo durante el tratamiento ya que, por muy aversivo que fuese este, siempre lo será más el estímulo desencadenante. Si el animal en tratamiento es un dominante, debemos apartarlo de los demás ya que, el riesgo de que contagie al resto, es muy elevado. En el caso de que se tratara de un subordinado, la presencia de dominantes que no reaccionen al estímulo, será tremendamente beneficiosa pare el perro. Es desaconsejable tratar de que el animal asocie el estímulo desencadenante con la licitación condicionada de conductas instintivas. Me refiero, a título de ejemplo, a darle salida al perro mordiendo cuando suena un cohete. En este caso estaríamos potenciando su agresividad y condicionándolo de forma errónea. Es mucho más beneficioso unir al estímulo unas conductas lúdicas o de tranquilidad. En términos generales debemos huir de asociar el desencadenante con estímulos de supervivencia y/o reproducción.
Algunos autores sugieren la posibilidad de que alguna causa orgánica y no genética o aprendida, justifiquen alguna fobia del tipo imnata. La hiperacusia podría ser una de ellas ya que para un perro que oye demasiado, la sola presencia de un agente ruidoso podría ser desencadenante de miedo por dolor.
De todas formas, debemos pensar que el perro doméstico está en un proceso de selección artificial que ya ha conseguido bajar su timidez a umbrales muy bajos en comparación con sus parientes en libertad. ¿Y las fobias?.
Conclusiones:
Las fobias pueden ser genéticas y solidarias al factor miedo o adquiridas por sensibilización.
Antes de diagnosticarlas es imprescindible descartar una causa orgánica.
Pueden presentarse frente a uno o varios estímulos.
Las adquiridas por proceso de sensibilización suelen aparecer frente a un solo estímulo.
El rango de percepción sensorial del indivíduo es un factor determinante de la intensidad de la fobia.
Tienen difícil solución y no deben ser tratadas por personas no formadas en comportamiento ni veterinaria.

EL PERRO EN MOVIMIENTO

Acción muscular Según los movimientos que puedan realizar los músculos se clasifican en:
Flexores: los que aceptan un punto móvil a otro fijo.
Extensores: alejan el punto móvil del fijo.
Aductores: acercan lateralmente un punto móvil al plano sagital
Abductores: alejan el punto móvil al plano sagital.
Rotatorios: efectúan un movimiento de circundición alrededor de un punto fijo.
MOVIMIENTOS ARTICULARES

ARTICULACIóN ESCAPULO-HUMERAL
(paletilla)
Cinco clases de movimiento
Flexión
Extensión
Aducción
Abducción
Circundicción
ARTICULACIóN
RADIO-CUBITAL
(codo)
Dos tipos de movimientos
Extensión
Flexión

ARTICUALCIóN
COXO-FEMORAL
Cinco clases de movimientos
Extensión
Flexión
Aducción
Abducción
Circundicción
ARTICULACIóN
TIBIO-FEMORAL
Dos movimientos
Extensión
Flexión
ARTICULACIóN
TIBIO-TARSIANA
Dos movimientos
Extensión
FlexiónLos movimientos de aducción, abducción y circundicción son meramente testimoniales en el perro. En este animal toda la acción muscular importante de los miembros se centra en la marcha hacia el frente. Los músculos aductores y abductores prácticamente no actúan más que como estabilizadores y fijadores de los miembros, pues el perro, cuando el paso y sobre todo el trote, son muy acelerados tiende a juntar las patas hacia el eje longitudinal, tanto de atrás como de delante. Estos dos tipos de movilidad y las circundicciones son indispensables para controlar movimientos inesperados.Movimiento:Cuantas más nociones se tengan sobre el funcionamiento del cuerpo del perro más fácil será sacarle partido, entrenarlo o utilizarlo de acuerdo a sus necesidades específicas consiguiendo resultados más satisfactorios. Para comprender mejor el sistema locomotor de un animal hay que analizar totalmente antes su estrategia de supervivencia 1 o funcionalidad. Incluso antes de eso hay que tener cierta comprensión de la estructura de los miembros, tanto anteriores cómo posteriores y de como están ensamblados en el cuerpo.Conviene que repasemos las nociones básicas:Como punto de partida y bajo el punto de vista evolutivo podemos considerar al cuerpo de cualquier animal como un ser con la necesidad ineludible de desplazarse por el suelo o en el agua para cubrir sus necesidades vitales. Para moverse en el agua necesita aletas y cola que le impulse; en tierra y, con excepción de las serpientes, necesita patas. Si la única misión de éstas fuera impulsar al cuerpo hacia adelante, habría una considerable fricción con el suelo, con la consiguiente pérdida de energía. Por eso un cuerpo que necesite moverse requiere, no sólo que le impulsen hacia adelante, sino que se le empuje hacia arriba y que se le mantenga alejado de la tierra para evitar rozamientos.Los reptiles y anfibios cumplen esta misión de manera precaria. Motivo: que las patas sobresalen a los lados del cuerpo. El simple esfuerzo de levantar el cuerpo con unas piernas que exceden a los lados es considerable e incide sobre la facilidad de ir hacia adelante y sobre la resistencia. En los perros observamos esta manera de desplazarse durante los quince primeros días de vida. La colocación vertical de las patas directamente debajo del cuerpo significa un gran adelanto para andar y para correr, además, un perro o un gato pueden estar de pie todo el día sin gran fatiga. Un cocodrilo o un lagarto no podrían hacerlo y, además, para trotar necesitan reptar, y sólo galopan por un corto trecho, con gran esfuerzo y a base de dar saltos. Eso no significa que el cocodrilo sea ineficiente, es eficaz y mucho en el agua, su elemento de caza.Esto demuestra que el aparato locomotor de cada raza perruna en particular o animal en general tiene que contemplarse bajo el punto de vista integral de su estrategia evolutiva. De una estrategia evolutiva forzada por el hombre para que ejerza determinadas funciones y que difiere de la de sus antepasados salvajes, mucho menos especializados.La diferencia de longitud de las extremidades de los distintos perros, la anchura de su pecho, que incide entre otras cosas en la colocación de las patas, en la aerodinámica y en la estabilidad, la longitud y flexibilidad de su línea dorsal, la del cuello e, incluso la forma de la cabeza y la existencia o no de prognatismo, han de ser contempladas con criterios de planificación funcional, en otras palabras: proceso evolutivo forzado por el hombre.Todo desplazamiento, y mucho más la carrera por su velocidad, es un proceso de aplicación de energía y su consumo correspondiente. La energía se aplica cuando las patas traseras impulsan proyectando hacia adelante y hacia arriba y es consumida por las delanteras cuando aterriza. El cuerpo caería al suelo si los miembros delanteros no amortiguaran e impulsaran hacia adelante: energía aplicada para desplazar el cuerpo al frente, absorbiendo y desviando el impulso adquirido para proseguir el movimiento en equilibrio dinámico 2.Para entender el proceso de absorción de energía por los miembros delanteros podemos considerarlos como amortiguadores que suavizan el impacto del aterrizaje del cuerpo al avanzar. Cuando la articulación del miembro delantero empieza a hundirse entran en acción los músculos de los hombros para impedirlo. Absorbe la energía aplicada hacia adelante por los miembros traseros.Para que esto pueda ocurrir, que los miembros delanteros actúen como amortiguador, las patas no deben de estar directamente unidas al cuerpo. Si fuera así no se opondrían con suavidad al impacto, la absorción sería brusca y con una sacudida terrible. El perro tiene los miembros delanteros separados del hombro y sujetos por músculos, no en una cavidad ósea como los traseros. De esa manera absorbe la energía con suavidad a cada paso.Por el contrario, el tren posterior no está hecho para absorber energía: lo está para aplicarla. Por eso las patas traseras están encajadas directamente por su parte superior en la fosa de la pelvis y quedan sujetas a ella por ligamentos y tendones. El acople es muy consistente y sus desventajas como amortiguador son muy grandes. La cabeza del fémur está sujeta a la cadera sólidamente y la rodilla está trabada, de ahí la incapacidad de absorber energía: la energía no puede huir hacia ningún sitio, no puede difuminarse.Es por eso que los saltos en vertical (con caída sobre las patas traseras), uno de los mejores ejercicios para desarrollar los cuartos traseros, están desaconsejados como ejercicio en series en perros pesados. Al no estar las patas traseras preparadas para amortiguar la caída se pueden producir lesiones en las rodillas.El movimiento es diferente en cada raza y por lo tanto es un rasgo de tipicidad que define. Cada raza tiene una manera de moverse propia de ella misma y una forma de trasladarse característica. No se puede estudiar la locomoción en función solamente de causa y efecto sino como parte de una estrategia general de utilización. En realidad, el sistema locomotor de un animal forma parte de una adaptación compleja a una ecología específica. Ha de ser una constelación de atributos actuando conjuntamente. Hay que estudiar la estrategia de supervivencia del animal antes de poder entender su sistema locomotor. Así pues al valorar el movimiento de un perro debemos tener claro un concepto básico: su funcionalidad. Entendemos por funcionalidad la capacidad de cumplir el fin para el que ha sido creada cada raza.Eso hace que no se pueda contemplar con la misma óptica a una raza que ha sido literalmente diseñada para correr al trote que a otra que lo ha sido para perseguir al galope a su presa o seleccionada para cazar reptando dentro de las madrigueras.En algunos perros el equilibrio estático se ha desarrollado como prioridad cediendo a veces cualidades en su equilibrio dinámico o en su rapidez o resistencia. En otros perros en los que se han contemplado como ideales las facultades para recorrer distancias largas en resistencia, o cortas con mucha rapidez, predomina el equilibrio dinámico sobre el estático.El perro es capaz de efectuar cuatro tipos principales de andadura y una gran cantidad de variantes: el paso, el trote, el galope y la ambladura, son los primordiales. También podemos definirlos en categorías de apoyados y volados. Los apoyados son aquellos en los que siempre hay por lo menos un pie descansado en el piso; los volados son aquellos en los que hay momentos en los que las patas pierden el contacto con el suelo.Aunque ya empieza a existir bastante literatura especializada sobre el tema, todavía es indispensable, si queremos comprender bien los tipos de desplazamiento en el perro, que recurramos a estudiar lo mucho que hay publicado sobre el caballo. Lo mismo que en reproducción, el movimiento está mucho más investigado en estos animales, que tienen más importancia económica, o que están ligados a clases sociales más pudientes que el perro. La nomenclatura y la kinesiología del movimiento son prácticamente las mismas en la equitación que en cinología.La buena movilidad tendría que estar implícita en cualquier perro, tenga éste cualquier peso, altura, proporción, función o raza. Por desgracia no sucede así, la moda, o la selección para tareas demasiado especializadas, llevan a que a veces se usen criterios teratológicos que significan la elección de determinadas cualidades a costa de sacrificar otras de tipo general para fomentar las especiales de la raza.Algunas observaciones:
Cuando el cuerpo del perro tiende a ser cuadrado se impone el galope de suspensión simple y la facilidad para saltar, pero no el galope de doble suspensión ni el trote volado. En cambio, en el trote y al aproximarse la pata delantera y la traseras, ambas pueden interferirse y tropezar, por eso algunas razas de línea dorsal corta tienden como recurso a un trote diagonal.
Los perros de cuerpo largo tienen generalmente un trote fácil a condición de ir acompañado de angulaciones más bien amplias. Son necesarios para cubrir un trabajo diario de resistencia al trote. En cambio su galope, aunque puede ser rápido, es muy fatigoso.
El paso, el trote y el galope son las maneras de marchar más conocidas.
El amblaje es paso normal en algunas pocas razas y también lo emplean todas en determinados momentos para descansar, ahorrar energía o en momentos de conflicto emocional.
La fuerza, conjuntada con la resistencia, es indispensables para los perros de trineo, que tienen que trabajar jornadas extensas recorriendo largas distancias y, encima, arrastrando peso.
Los perros de granja y de ganado vacuno no necesitan un paso rápido. Se emplean propuestas diversas: o perros muy pequeños que conducen a los animales por entre las patas o soluciones más grandes y robustas de tipo molosoide.
Una delantera fuerte, bien musculada y compacta ayuda a reducir el shock de impactos repentinos y a los cambios bruscos de dirección.
Cuartos traseros muy fuertes y espalda flexible, con facilidad para arquearse y extenderse al máximo, son indispensables para conseguir la máxima rapidez en el galope.
Función y forma corporal están íntimamente relacionadas.
La estructura no es la única responsable de las diversas facultades: resistencia, velocidad, fuerza... El sistema nervioso y la proporción de fibras lentas, rápidas e intermedias en los músculos son factores que hay que tener en cuenta.
Excesivas angulaciones favorecen el trote y el galope en determinados casos, pero siempre disminuyen la estabilidad en parado y van ligados a menos fuerza.
Las angulaciones pobres producen un pobre movimiento, con pasos cortos y rígidos.
Las angulaciones tienen que estar proporcionadas con la longitud del cuello, de la línea dorsal y de las patas, aunque hay excepciones cuando un mismo perro tiene que estar adaptado a trabajos muy opuestos.
Bajo el punto de vista del expositor, angulaciones más pronunciadas producen un movimiento más bonito. No obstante el movimiento tiene que estar subordinado a la funcionalidad específica de cada raza.
Cuando las angulaciones delanteras y traseras no están proporcionadas se producen defectos de ritmo.
No existe un solo tipo de resistencia. Hay perros que son resistentes al trote, otros tienen un galope que aguanta más que la media, algunos resisten todo el día al paso, los perros de trineo recorren distancias increíbles arrastrando peso y con pasos cambiantes, los perros de pelea pueden aguantar hasta una hora trabados... La resistencia, lo mismo que la velocidad, dependen de las proporciones entre la estructura ósea, el sistema nervioso, la musculatura, con sus fibras blancas y rojas en la conveniencia debida y las fijaciones y motivaciones mentales apropiadas.
En pocos estándares se menciona a la espalda como lo que realmente es: una porción de la línea dorsal que comprende cuatro vértebras. Casi todos se refieren a la línea dorsal íntegra cuando se refieren a la espalda.
La estabilidad estática requiere una base amplia.
Conforme se aumenta la velocidad las patas convergen hacia la línea sagital, pues la estabilidad dinámica necesita menos base cuanto más rápido se va.
El pie largo es indispensable para andar más rápido en terreno blando.
En terreno duro se desenvuelve mejor el pie recogido, además tiene menos riesgo de lesiones y excoriaciones y rozaduras. El paso:Es la marcha más lenta y descansada. El centro de gravedad realiza desplazamientos muy limitados. Se efectúa por la elevación simultánea de un miembro delantero y su opuesto posterior y así consecutivamente. Es la manera de andar que emplean casi todas las razas, sobre todo las que tienen que recorrer grandes distancias guardando ganado o tienen como misión largas rondas de vigilancia.La ambladura:Es una marcha muy particular que, sin embargo, es propia de algunas razas o que está determinada por algunos momentos o situaciones muy específicos. El centro de gravedad se desplaza lateralmente y está sujeto a amplias oscilaciones y no de arriba abajo como en los otros pasos o como sería lo ideal: paralelo al suelo, sino culebreando. Excepto algunos perros de pastor que lo efectúan espontáneamente y en pocas razas más, en casi todas las razas es un paso no deseado. Se considera qué es un paso de relajación que el perro emplea cuando quiere hacer descansar algún grupo muscular y también cuando el paso del guía lo lleva a él. En la naturaleza se da espontáneamente. Los lobos lo emplean de manera intermitente para descansar durante los recorridos largos, intercalándolo con el paso normal, el trote, el galope y muchas variaciones intermedias de todos ellos.En algunas circunstancias el perro lo utiliza a efectos de paso ceremonial y, en perros muy jóvenes, suele ser una muestra de inseguridad.El trote:Es un movimiento bastante inestable, pero fácil. Es la marcha ideal para recorrer grandes distancias a una velocidad sostenida. En la naturaleza y en casi todas las razas caninas solamente se da espontáneamente el trote corto y suele ser un paso de transición o de alternancia con los otros. En el perro doméstico suele ser un tipo de desplazamiento, si no aprendido, si muy mejorable por el entrenamiento. Es el modo de trasladarse por el que se juzga el movimiento en las exposiciones. Es un paso de voladura que se realiza mediante el movimiento simultáneo de la pata delantera derecha y de la posterior izquierda, a esto sigue una fase casi imperceptible de suspensión y luego se repite el movimiento con la pata delantera izquierda y simultáneamente la trasera derecha. El período de suspensión se produce justo en el momento del cambio de diagonal. Según el AKC es un movimiento en dos tiempos.El pastor alemán es un especialista en el "trote volado", para el que tiene un tipo de estructura única. Sus angulaciones, muy amplias, y la línea dorsal larga, así como la coordinación y el buen ritmo son también indispensables. El momento de suspensión es más pronunciado en este tipo de trote que en el trote normal.Es necesario especificar tres puntos para comprender y "ver" correctamente este movimiento:
Dos patas opuestas en diagonal dejan de soportar el cuerpo al mismo tiempo.
Existe un brevísimo espacio de tiempo en el que el cuerpo permanece suspendido en el aire mientras se produce el cambio de diagonal.
Los pies opuestos de cada diagonal tocan el suelo al mismo tiempo. El trote cortado (hackney-ride) es un ejemplo de lo que es un trote de corte totalmente distinto. Se da en algunas razas pequeñas y se distingue por un levantamiento muy aparatoso de una pata delantera y su correspondiente opuesta posterior. La articulación se flexiona y levanta ostentosamente, tanto la anterior como la posterior. Es un momento en que se prolonga una situación de equilibrio transversal, la otro pata de apoyo delantera con su correspondiente enfrentada anterior. Este trote deja de ser un movimiento a dos tiempos para convertirse en otro de cuatro tiempos.Sabemos que el trote en los animales no domesticados es casi un paso de transición hacia el galope, y que su perfeccionamiento es, si no artificial, si fruto del adiestramiento. El cambio del trote al galope se puede retrasar y mejorar mediante el tratamiento apropiado, se trata de llevar al animal más allá de donde él hubiera ido de manera espontánea, aguantarlo al máximo alargando el tranco y pasar lo más tarde posible al galope.Como en los show no hay más remedio que enjuiciar a todas las razas por igual por el paso al trote, debemos saber claramente que es lo que podemos exigirle a cada una en particular.El galope:Es la marcha más rápida, pero también la más fatigosa. Es una marcha a saltos. Se ejecuta en cuatro ritmos, uno de ellos de suspensión. En el galope volado, propio de las razas que cazan a la carrera y de los dobermann, el tiempo de suspensión es pronunciado. Al pasar a apoyar las patas delanteras, una lo hace y desliza antes que la otra. Las traseras también fluyen y empujan sucesivamente. Esto es más marcado cuanto más largo sea el tiempo de suspensión. Es propio de las razas esprintadoras y de las medio fondistas.Las angulaciones amplias son indispensables junto a una espalda fuerte y flexible, la velocidad desarrollada en línea recta, en pista, tiene un análisis distinto a la carrera en campo. En la primera: la salida y el incremento de la velocidad, hasta alcanzar la velocidad de crucero, se efectúan con una aceleración constante. En las segundas: los cambios de ritmo hacen que tengamos que contemplarlas con una óptica diferente, por otro lado los cambios constantes de trayectoria necesitan de unos hombros fuertes para soportar los shock que se producen constantemente.La impulsión es realizada por la contracción y posterior extensión del tercio posterior del cuerpo, región lumbar, grupa y patas posteriores. Se realiza de abajo hacia arriba en diagonal con el suelo en un ángulo de, aproximadamente 25-30º, en lucha constante contra la fuerza de la gravedad que empuja el cuerpo hacia abajo, el resultado final es el avance. Al ir a efectuarse el apoyo, las patas de delante avanzan de una manera cuanto más pronunciada mejor, con la colocación que tendrían los brazos (en el hombre) al tirarse a la piscina, es decir: cuanto más metida esté la cabeza entre las patas... mejor y, pasando por la vertical se retraen lo más exageradamente posible, permitiendo el ideal de que durante su apoyo las patas de atrás se crucen avanzando por delante de ellas. Es ideal que los perros galopadores tengan ligeramente más alta la grupa que la cruz y más aún si tienen que preverse cambios de dirección a plena velocidad. Un ejemplo típico son los galgos de campo y los dogos argentinos.En todos los casos tiene que buscarse el más fuerte empuje hacia adelante y la máxima estabilidad que permitan las características raciales; el galope no está hecho para ahorrar energía, sino para conseguir la máxima rapidez.Una manera de galope más relajada es el "medio galope", que realmente es el normal en las razas no especialistas. Una manera de desplazarse más lenta que el galope volado, pero menos cansado. La suspensión es menor y es más raso con relación al suelo. El apoyo de las patas, tanto delanteras como traseras en casi simultáneo, prácticamente sin deslizamientos sucesivos. Las piernas delanteras se mueven casi al tiempo y la pareja trasera les sigue después del salto. El cruce de las patas delanteras y traseras es menor y en algunos casos inexistentes.El cantering, canter o galope recogido, es un tipo de paso que emplean los perros de trineo muy habitualmente. Es un paso más lento que los otros tipos de galope y más descansado, con tres ritmos por zancada. Dos patas se mueven por separado y las otras dos en un par diagonal.Una buena definición del galope con suspensión pertenece a "Stonehenge", famosa autoridad canina inglesa del siglo XIX, y data de 1872:"La perfección del galope depende sobre todo de que el poder de extensión de los hombros y patas delanteras sea máximo, así como llevar las piernas posteriores avanzando mucho para conseguir el empuje de propulsión. Aunque los cuartos posteriores sean buenos y bien centrados en la acción, mientras los hombros no empujen a las patas delanteras, la acción será fatigosa y lenta. Por el contrario, si los hombros son flexibles, pero las piernas posteriores no llegan bien llevadas hacia delante, o no empujan con fuerza el cuerpo delante de las patas delanteras, la acción puede ser elegante pero no poderosa y rápida. A este propósito, por lo tanto, nosotros pedimos buenos hombros, buenos muslos, una buena espalda, y buenas piernas, y, por último, pulmones y corazón, todas estas circunstancias son esenciales para mantener la rapidez, dentro de un bien formado y amplio pecho". Es indudablemente que este señor no era tonto: lo quería todo.No podemos pensar que un galope es más perfecto que otro, depende de la especialización de la raza, por ejemplo: un lebrel de cualquiera de las numerosas razas que engloba este término no podría capturar a una liebre a un galope medio, en cambio un perro de trineo no podría trabajar con el trote volado de un galgo. Para poder hacer fuerza cuando tira del trineo emplea el galope recogido y otros numerosos pasos, alguno de ellos intermedios.

ADIESTRAMIENTO - NUEVAS HABILIDADES

NUEVAS HABILIDADES
Si su perro ha resultado un buen alumno y ya domina por completo el adiestramiento básico, quizás desee introducirlo en nuevas habilidades para pasar ratos agradables que, en este caso, no serán obligatorios como son los de obediencia básica, pero si muy amenos.
Una de las habilidades es hacer que el perro se siente sobre las patas y ladre. Este ejercicio es aconsejado para perros pequeños o medianos que posean la disposición adecuada. A los perros de perros de talla grande les resulta incómodo mantener el equilibrio en esa posición. Los perros recios y de patas cortas, cómo el Yorkshire Terrier o el Maltés, la practican con mucha facilidad y apenas necesitan aprendizaje.
Para enseñar este ejercicio, el perro debería tener al menos seis meses. Empezaremos sosteniendo un premio a la altura de la cabeza del perro, próximo a su alcance y mostrándoselo, diremos con voz agradable: - "Pide" o "Arriba" o "Firme". Esperaremos hasta que el perro levante suavemente la parte delantera de su cuerpo encontrando el punto de equilibrio. Repita la orden y, al mismo tiempo, recompense con el estímulo.


Repita el procedimiento, animando al perro a mantener el equilibrio por sí solo. Se tendrá que tomar algo de tiempo y paciencia para realizar este ejercicio, de lo contrario su perro podría balancearse y apoyar rápidamente una pata para asegurarse ante la primera señal de pérdida de equilibrio. Si el perro se balancea mucho, pruebe a practicar el ejercicio en un rincón, dónde las paredes le sirvan de soporte y le den seguridad.
Generalmente los cachorros aprenden y ejecutan este ejercicio con gran celeridad. . Prémielo únicamente cuando sea usted el que le haya ordenado que ejecute el ejercicio, evitando hacerlo cuando adopte él la postura de forma espontánea, fuera de contexto y para obtener un premio.
Otra habilidad nueva que le podemos enseñar a nuestro perro sería el ejercicio de "hacerse el muerto". Para realizar este ejercicio, el perro deberá primero conocer la orden de tumbado. El paso siguiente sería enseñarle a hacerlo de costado cuando aparece la orden de "muerto".
Una vez tengamos tumbado el perro, bajo la orden de "muerto", le empujaremos suavemente hasta colocarlo en la posición en la que el animal estará en el suelo tumbado de lado. Lo mantendremos así presionándole con la mano, lo practicaremos varias veces y en unas cuantas sesiones, asociará la orden con esa posición. Es importante recordar que siempre hay que elogiar y premiar al perro cuando ejecute correctamente una orden.
A medida que nuestro perro vaya creciendo, quizás notemos en él pequeños hábitos que pueden desarrollarse y convertirse en habilidades peculiares de manera natural.
Por ejemplo: algunos perros arrojan objetos o incluso los recogen y nos los traen para que se los lancemos y juguemos con ellos. Otros aprenden a abrir puertas, a levantar una alfombra o a esconder cosas debajo. Estas conductas son variantes de comportamientos caninos normales y pueden fomentarse mediante el estímulo y la recompensa.
Para enseñarle a dar la pata cuando se lo ordene, siéntese o arrodíllese y haga que él se siente frente a usted. Indíquele la orden: - ¡dame la pata! o ¡dame la patita! y tómela con su mano elogiándolo claramente. Repita el procedimiento con la otra pata y así sucesivamente hasta que se fije la respuesta que buscamos.
Que el perro ladre cuando se le ordena, puede ser útil además de divertido. Empezaremos dándole la orden " Ladra" cada vez que él ladre voluntariamente. Cuando asocie el perro la palabra con la acción de ladrar, prémielo y dígale " ladra". En varias sesiones en las que el perro asocie la orden con su premio, lo habremos conseguido.
Correr tras una pelota y llevarla en la boca forma parte del instinto cazador de perro, por lo que nos será muy fácil enseñárselo.
Le colocaremos una correa larga al perro, le haremos sentar a nuestro lado y mostrándole la pelota o el objeto que queremos que nos traiga, lo lanzaremos a la vez que le daremos la orden de "Trae".
Al principio lanzaremos el objeto a una distancia corta, una vez que el perro atrape el objeto, tiraremos de la correa hacia nosotros mientras le decimos "Aquí". Cuando lo tengamos delante, con el objeto en la boca, se lo forcejearemos, pero nunca se lo quitaremos de la boca hasta que él ya entienda el juego y nos lo entregue.
Progresivamente, iremos aumentando la distancia de tirada del objeto y como habremos practicado la llamada con la orden de "Aquí", ya no será necesario tenerle puesta la correa; lo practicaremos sin ella.
La correa en un principio nos asegura que el perro no se irá corriendo con el objeto y nos dejará solos. Con ella, nos aseguramos que la orden que le vamos a dar la ejecutará correctamente porque no podrá escapar.
En este ejercicio practicaremos la llamada y a la vez aprenderá a traernos la pelota o cualquier otro objeto que lancemos.
" A algunos perros, les gusta traer objetos en la boca y es una cooperación que no debe desperdiciarse, aunque el periódico nos llegue algo desbaratado"

EN TORNO A LA CRÍA

Cuando escribía el capítulo en el que les aconsejaba como, dónde y a quién debíamos comprar al que luego fuese nuestro buen Truco, les decía que buscasen el asesoramiento de un experto en conducta y de un veterinario ya que, de esta forma, estaríamos a salvo de errores que, al paso del tiempo, enturbiarían nuestra convivencia con nuestro mejor amigo. A petición de algunos de ustedes, expondré una breve reseña del concepto de cría y selección pero, no olvide el amable lector, que la selección a que me refiero no es la natural si no la impuesta al perro por la mano de Homo sapiens desde hace 15.000 años.RazasPor definición, las razas son grupos de animales relacionados, suficientemente similares en su bagaje genético y aspecto físico, como para producir descendientes físicamente similares cuando se cruzan entre ellos (Blood y Studdert, 1999).Después del perro de las turberas, quizás la primera raza bien definida fue la del Saluki, un lebrel persa cuyo nombre significa “noble” y fue criado para ayudar en funciones de caza (Pugneti, G. 1980). Desde ese momento, y a tenor de las necesidades vitales del hombre, de su grado de civilización y de sus problemas de adaptación, las razas se iban seleccionando a la vez que se hacían más numerosas, hasta llegar a una clasificación basada en las funciones a las que son destinadas: caza, pastoreo, guarda, utilidad y compañía (Pozuelos et al, 2000).Corresponde a la cultura antigua romana la primera clasificación zootécnica en la que el politipismo apunta como factor racial selectivo. Así, encontramos dos tipos muy diferenciados en su aspecto funcional cinegético; el Nares sagaces y el Pedibus céleres. Esta clasificación, que se completa con perros de guardia, deporte, compañía y bélicos, sugiere una especialización acusada dentro de la actividad venatoria. (Pozuelos, A. 2003). Los perros de guerra ayudan a Homo en la defensa territorial, conquista de territorios y recursos y en la ocupación del territorio vencido (Pozuelos, A. Et al. 2000). La aproximada definición de Pugneti, en cuanto a la morfología del perro de guarda, se refleja en el minucioso mosaico que advertía de su presencia.
Entrada de la casa del Poeta Trágico en Pompeya, Siglo I Estos animales eran atados durante el día y sueltos por la noche para la defensa próxima de la vivienda y sus habitantes. El relieve en yeso de este perro de Pompeya demuestra que el animal fue sorprendido por el desastre cuando se encontraba todavía atado.
No obstante, la mayor parte de las razas modernas del perro tienen un origen reciente; los últimos 150 años (Dennis-Bryan & Clutton-Brock, 1988). Fue antes de la Revolución industrial, y en Inglaterra, cuando comenzó la selección de ejemplares de trabajo en los que ya se buscaba, además de las habilidades propias de su actividad, un patrón de belleza y corrección física. El primero de Abril de 1873, fue fundado en Londres el Kennel Club inglés iniciándose la confección del Stud-book. En 1884 se crea el American Kennel Club y en 1911 la Real Sociedad Central de Fomento de las Razas Caninas en España (Pugneti, G. 1980).Nos encontramos pues en un siglo donde la cría del perro se convierte en una actividad de gran auge debido a la extraordinaria demanda de este animal como mascota, terapeuta y "antidepresivo". En los países desarrollados aumenta el censo de perros mientras desciende el índice de natalidad, se venden más mascotas que cochecitos para bebés y Homo descubre el verdadero papel que el perro desempeña en su vida.Como no podía ser de otra forma, aparecen los criadores profesionales que hacen de esta actividad su principal fuente de lucro; unos muy bien formados, otros con mucha ilusión y poca técnica y otros sin ilusión, técnica ni formación. El buen consumidor se aproxima a ellos con la ilusión de poseer un buen animal y empeñar sus ahorros en ello. Su hijo quiere un compañero de juegos; su mujer, una seguridad para el hogar y el dueño, un amigo. Desgraciadamente no siempre se obtiene el beneficio buscado a tenor del recurso empeñado y Homo se siente frustrado cuando compara a Truco con los ejemplares que aparecen en la TV.Los clubes de raza, mencionados anteriormente, aparecen como respuesta a la necesidad de velar por la pureza del estándar psicomorfológico del perro al que avalan. Desgraciadamente en ellos también intervienen las manías, debilidades y afanes crematísticos de Homo.No podría terminar el artículo sin hacer un llamamiento a los directivos responsables de la cría de Truco. Les ruego que se formen, que estudien al perro como especie y a la raza como variedad, que coloquen a científicos imparciales como asesores de veterinaria, genética o conducta en la cría y establecimiento de los patrones, que velen por el “producto final” que va a parar a las manos del amable dueño de un perro casero y que trasladen esos conocimientos a todos aquellos futuros profesionales de la producción de animales de compañía. No hago este llamamiento como científico sino como humilde estudioso de la conducta canina al que ustedes, miles de suscriptores, honran con su asiduidad y amistad.

UNA CUESTIÓN DE LÓGICA

El origen como especie de su amigo Truco y la relación que mantiene con nosotros desde hace 15.000 años, es un tema que ha suscitado mucha polémica, ha inspirado multitud de hipótesis y ha hecho que varios autores lo hayan investigado utilizando todos los medios que la ciencia pone a nuestro alcance.De esta forma, hoy día sabemos que el perro es una especie procedente del lobo pero que, en la actualidad, prácticamente ya no tiene que ver nada con sus patrones de conducta si exceptuamos, su tendencia gregaria, alta jerarquización y posibilidad de hibridación.En 1997, científicos como Savolainen, Vila o Wayne determinan, por comparación entre las secuencias del ADN. mitocondrial de perros y lobos, que aquel desciende este y que las demás especies de cánidos, como el coyote o el chacal, se separaron de los lobos hace más de un millón de años. Una vez determinado su origen genético la siguiente duda planteada puede ser la de si el lobo fue domesticado en un momento histórico y en un lugar determinado o si, por el contrario, esta domesticación fue diversa en sitio y tiempo.Para responder a esta cuestión, Savolainen y sus colaboradores examinan secuencias de ADN de más de 600 perros de distintos lugares y llegan a la conclusión de que todas las poblaciones de perros proceden de un mismo y estrecho pool génico, es decir, de muy pocos antepasados genéticos. En el mismo estudio se estudia la variabilidad genética para fijar el sitio de domesticación y se fija el Este asiático como lugar de aparición, hace 15.000 años, de la especie de nuestro amigo Truco.Pues bien, resumo la trayectoria de la aparición del perro en pocas hipótesis:
Desciende del lobo.
No está emparentado, en la descendencia próxima, con el chacal ni el coyote.
Procede, como especie, de muy pocos ejemplares de lobo.
Apareció en el Este asiático hace unos 15.000 años. Está claro que los primeros restos arqueológicos de perros domésticos aparecen en Oberkassel (Alemania) y Ein Mallaha (Israel) y datan de unos 12.000 años. Concretamente, en este último yacimiento, aparece una mujer abrazada a un perro. El problema es que según Thurston los huesos de lobos y homínidos han aparecido juntos desde el Pleistoceno medio, es decir, desde hace unos 400.000 años lo que confirmaría la hipótesis de la descendencia lupina del perro pero también nos presentaría las preguntas más difíciles de responder: -¿Qué pasó entre hombre y lobo desde 400.000 años atrás y los recientes 15.000? - ¿Quién se acercó a quién? - ¿Fue el hombre quien domesticó al lobo? - ¿El perro es una especie auto domesticada? Efectivamente el periodo de domesticación que separa a las dos especies ha sido el responsable de esas diferencias morfológicas y conductuales que se conocen como Neotenia. Pero antes de esa domesticación, el lobo debió estar muy próximo al hombre para que pudiera ser domesticado o lo que es lo mismo, tuvo una “proximidad” de 385.000 años como mínimo.Nos encontramos por tanto, en un vacío histórico de mucho tiempo, que la ciencia no puede llenar. En ese vacío, el lobo tomó contacto con el hombre, se domesticó o fue domesticado, cambió su carácter, se adaptó a un ecosistema distinto, transformó y diversificó su morfología y más aun; creó una nueva especie. Hasta aquí la ciencia, después la especulación y al final, como siempre, la lógica. Yo explicaba a mis alumnos este "momento oscuro" de la filogenia canina, con más detalles de los que les expongo a usted, lector y con más datos de referencias bibliográficas. A continuación les propuse que lanzaran sus hipótesis sobre el tema no sin antes proponerles dos alternativas:
¿Fue el hombre quién se acercó al lobo para domesticarlo?
¿Fue el lobo quién se acercó al hombre para que este y posteriormente, lo domesticara para su aprovechamiento como especie? Como esta pregunta es obligada para todos los alumnos y además yo no tengo la demostración científica para su respuesta, el debate se extendía entre hipótesis de una u otra alternativa apoyadas por autores de uno u otro parecer. Algunos eran partidarios de la hipótesis de comensalismo de Meniel; “El lobo se acercó a los campamentos humanos para comer y ser comido a su vez”. Luego a alguien se le podía haber ocurrido la idea de domesticarlo por primera vez. Otros se aferraban a la romántica teoría de Lorenz: Algun cazador trajo al campamento una cría de lobo, se le entregó a un niño, fue criado en cautiverio y comenzó la domesticación. Una alumna llamada Eva, formada ya en el concepto de selección natural, se inclinó por la hipótesis segunda y además argumentó su decisión en estos puntos:
El lobo descubrió una fuente de recurso nueva y productiva, cerca del campamento humano.
Solo se acercaron a esta basura los que, de alguna forma, tuvieran un mejor carácter y algunos rasgos más "suaves" que los demás.
En este momento interviene la selección natural premiando estos caracteres y fijándolos en su mensaje genético.
El hombre se acerca a los ejemplares más dóciles e introduce, a posteriori, la selección artificial como etapa de la domesticación. Si se fija usted lector, verá que esta teoría coincide en el tiempo de convivencia hombre lobo, en el estrecho pool génico de los progenitores, en el sitio de domesticación y en la fecha. Esta hipótesis, más técnica, pormenorizada y comprometida, también fue desarrollada por el matrimonio Coppinger y bautizada como la hipótesis de Pinocho pero lo sorprendente es que mi alumna no había leído a estos ni a otros autores. Cuando le pregunté que método había utilizado me dijo algo así como que el mejor: la aplicación de la lógica. Lleva razón Eva en que, cuando no sabemos como explicar algo que no puede ser demostrado, lo mejor es utilizar algo a lo que no estamos acostumbrados; el sentido común que, como dicen en mi tierra, desgraciadamente es el menos común de los sentidos. Si la lógica es la cualidad y método de lo razonable, mi alumna hizo una buena demostración de este método. Lo mejor de todo es que ella salió contenta de su razonamiento y yo recibí un apoyo a la hipótesis que, por cierto, también comparto.

¡CON TODO EL DOLOR DE MI CORAZÓN!

Trato de responder, en este artículo, a las reiteradas preguntas que ustedes me hacen sobre los ataques de perros a niños pequeños. Además, las tertulias caninas tienen casi siempre como tema de reserva estos desafortunados incidentes que, al parecer, han aumentado en esta última década. En los foros se pregunta una y otra vez el por qué de la mordida del perro de Fulano al niño de Mengano y es que realmente, el tema es muy importante siendo, como es, el desgraciado protagonista nuestro cachorro y el enemigo doméstico, nuestro inseparable Truco.Si aplicásemos el famoso ¿Por qué? etológico al hecho de que el perro muerda al niño en un momento determinado, podríamos respondernos con toda asepsia científica que lo hace porque:
Desciende de otros que sabían hacerlo.
Han aprendido de sus mayores.
Lo hace por cuestión de competencias.
Lo necesita para sobrevivir. Evidentemente, las dos primeras respuestas son tan ciertas como obvias y no merecen ser consideradas, la tercera es muy amplia en su concepción como para determinar el motivo de la mordida pero, la última, encierra la verdadera respuesta de la causa de cualquier agresión a un cachorro humano.Sabemos que el perro, como cualquier especie, utiliza la agresividad para:
Acceder a recurso.
Alcanzar estatus.
Impedir ser depredado.
Competir por hembra y territorio. Si se fija el lector en estos cuatro puntos podrá deducir que las ocasiones en las que el perro se vuelve peligroso serán:
A la hora de comer (recurso)
Cuando discute sobre quién es el que manda (estatus)
Cuando entiende que va a ser atacado (evita la depredación)
Cuando hay crías, la hembra está en celo o alguien entra en el territorio. Entendemos entonces que nuestro Truco, como individuo de cualquier especie, utiliza la agresividad simplemente para sobrevivir. Eso en principio, no es malo porque de la agresividad nace la competición y sin competición ninguna especie se adaptaría ni, por supuesto, evolucionaría. El problema estriba en que el niño chico no pretende colocar a su perro en peligro de supervivencia y sin embargo, con frecuencia es mordido por él.Pero, cuando el perro se vuelve peligroso por los cuatro factores enumerados anteriormente, amenaza con más intensidad al niño que al humano adulto. ¿Cuáles podrían ser las causas?
La constante comunicación agonística del niño.
Sus señales de intención.
Su olor neutro.
El menor tamaño.
La incongruencia y anarquía en los movimientos. Aparte de estas causas, el ataque al niño puede verse influenciado por factores raciales y, por supuesto, de aprendizaje. Me refiero a que los perros que no han tenido contacto con niños durante el periodo de socialización, y concretamente durante las semanas octava y novena de vida, son más propensos a morderles que los bien socializados.La jerarquización que debe darle usted, amo del perro, desde pequeño es un factor crucial en la prevención de estas conductas porque, como sabemos, un perro bien jerarquizado y consciente de que él es el último de la manada no presentará conductas agresivas del tipo de estatus hacia ningún niño.En muchas tertulias he oído insistentemente la máxima de que “ningún buen perro, modera nunca a un niño”. Evidentemente yo no puedo estar de acuerdo con ella. A todos mis alumnos les pregunto, en un tema de Etología canina, si una hembra Bóxer adulta y de carácter equilibrado podría originar un incidente con un niño. Todos responden que si y eso que la raza y el sexo del perro que les pinto es lo opuesto al concepto de peligro. Entiendo, por tanto, que ningún perro viene “preparado” genéticamente para no atacar a un niño y además, si sabemos que la conducta es una interacción compleja entre genes y medioambiente, no creo en absoluto al súper perro que nace para cuidar niños y sin posibilidad dar un disgusto. Creo, más bien, en perros sanos de espíritu, bien improntados, mejor educados y carácter equilibrado como sujetos no propensos a protagonizar un desastre. Aún así, jamás he dejado solos a un niño y a un perro... ¡Por el bien de los dos!La pregunta que con más frecuencia se nos hace a los terapeutas es la relativa a que hacer con el perro que muerde a los niños incluidos los propios. Realmente es un dilema y una decisión dura el aconsejar en cualquier sentido al dueño del animal.Hace muy poco tiempo, el que fue uno de mis mejores alumnos y experto en conducta canina, me comentaba el caso de un perro que estando dormido se asusta y muerde al niño que lo despierta. Discutimos sobre conductas instintivas y filogenéticas, carácter del animal, contexto de la agresión, influencia de la acción del niño sobre el perro y sobre cualquier factor que pudiera dar una inclinación a la balanza de un lado o de otro.Mientras estas discusiones se producían, el más pequeño de mis sobrinos, un bebé de menos de un año, fue mordido por una hembra de Setter inglés que no estaba parida, perteneciente a la familia que no fue molestada por el bebé y cuya agresión se produjo de forma inesperada y después de un leve gruñido. El resultado fue un grave desgarro en el cuero cabelludo y tres días de observación en el hospital. ¿Y ahora, qué se le puede decir al padre del niño? ¿Quizás que el animal interpretó mal una comunicación del bebé? ¿Acaso que el niño comunicó sobre intenciones? ¿Lo tranquilizará saber que el perro pertenece a una especie que no practica el infanticidio y en la que es difícil que se produzca el acto final de la agresión?Cuando fui consultado, y con todo el dolor de mi corazón, aconsejé la eutanasia del animal. Realmente dar estos consejos supone para un terapeuta un fracaso, sobre todo, cuando se podría haber previsto la conducta. A mi exalumno Pedro le di las razones que me inclinaron a esta decisión y ahora expongo a ustedes.
Como terapeutas debemos tratar todas aquellas conductas que supongan una molestia para el dueño del perro, familia, vecinos o ciudadanos en general.
También debemos acudir para remediar el sufrimiento psíquico que pueda afectar a un animal.
No deberíamos intervenir en el tratamiento de una conducta agresiva en la que se juegue la integridad o la vida de un ser humano, mucho menos si este ser es un niño.
De hacerlo, debemos poner el niño a salvo de cualquier reacción agresiva del animal.
Una vez que el perro ha mordido a un niño, la posibilidad de que esta agresión se vuelva a producir en otro contexto y bajo otros estímulos, es alta.
Cuando ha ocurrido la agresión, jamás debemos aconsejar que se regale el perro a otra familia ya que, de esta forma, solo trasladamos el problema y volvemos a poner a otro niño en peligro. Entiendo que estas razones son muy subjetivas, que son la mías, que pertenecen a mi propio bagaje deontológico y que no son en absoluto normas sacadas de un manual de Ética. Admito, por tanto, las posturas más permisivas y menos drásticas que la mía. Entiendo que el mal debe prevenirse mediante una buena socialización del cachorro. Insisto en que cualquier atisbo de agresividad debe ser eliminado de raíz y que, ante la duda de que un bebé pueda ser atacado por el perro de la casa, el animal debe irse del territorio porque, si la agresión se produce, yo aconsejaré la eutanasia... ¡Con todo el dolor de mi corazón!

LA JERARQUÍA Y LO POLÍTICAMENTE CORRECTO

Crece de forma alarmante el problema de la agresividad competitiva entre la población canina de los países "mas o menos acomodados". Como ustedes recordarán, esta agresividad es la que lleva al perro a tratar de escalafonarse por encima de su propio dueño y, por supuesto, de todos los miembros de la familia. Cuando el animal lo consigue, la convivencia deja de ser una alegría para convertirse en un problema grave, en un peligro muy definido y en algunos casos, en una pesadilla. Las familias se transforman en una diana de acreedores que les reclaman daños y perjuicios por aquel destrozo de su perro, por aquel intento de mordida a su niño o por aquella agresión injustificada. Se pierden amigos porque estos "desgraciados" no se dejan morder por el simpático chucho dueño y señor de visitas y reuniones. Los amigos de los hijos de la familia ya no quieren jugar en una casa donde te puedes encontrar con un colmillazo por un quítame allá esas pajas y hasta la asistenta se niega a trabajar en el circo donde hay que llevar armadura para que el león no se coma al cristiano.Curiosamente esta situación se mantiene unos tres años de media, tiempo más que sobrado para que el canalla del perro se haga a su puesto privilegiado y trate de no dejarse arrebatar su estatus de Alfa de manada. En ese tiempo los dueños, con toda timidez, hablan entre los que tienen el mismo problema, se lamentan e intercambian impresiones y vivencias.- Menudo susto me dio ayer Atila cuando atacó a la portera. Poco más y la muerde. A mí me tiró al suelo pero tuve la suerte de que me arrastrara y no consiguiera morder a la señora.- ¿Le castigaste luego?- Sí. Me puse muy serio. Le regañé a gusto y hasta le grité.- ¿Reaccionó Atila al castigo?- ¡Ya lo creo! Hasta me enseñó los dientes de lo duro que fui con él.- ¿Y tu? ¿Has conseguido que Marcos no te gruña cuando come?- ¡Que va! Todo lo contrario. Anteayer le tiró un derrote a mi sobrino que de no estar cerca su padre, le marca la cara.- Es que los niños son muy malos con los animales y ellos lo saben.- Pues yo me preocupé y lo llevé ayer mismo a un adiestrador.- ¿Qué tal fue la cosa?- Fatal. Mientras hablábamos, Marcos trató de engancharlo por la pierna, ya sabes, esa tontería que hace con quien no conoce. - ¿Cómo reaccionó el adiestrador?- Muy mal, le tiró una patada a la boca y tuve que intervenir para que no le pegara de verdad. ¡Y se llama profesional el salvaje! Estuve apunto de denunciarlo por maltrato a los animales.¿A que han oído ustedes alguna conversación como esta en el parque por el que pasean a sus perros? ¿A que han tenido ganas de llamar cantamañanas y calzonazos a estos educados dueños que hacen con sus perros lo políticamente correcto?Ya saben ustedes, queridos lectores, que el fenómeno científico y lo políticamente correcto no están necesariamente juntos y les digo más: Ahora, en mi España de siempre, lo políticamente correcto en el caso de los perros, consiste en estudiar la forma de escapar ileso y sin necesidad de psiquiatra pasados unos años de convivencia ínter específica. Los más ilustrados nos traen a la consulta a sus bestezuelas agresivas esperando que les hablemos de la bondad de la especie canina y de su amor por los humanos. Los demás leen libros de esos que nos convencen de que todos los perros son buenos para todo.¿Saben que la agresividad, en cualquiera de sus manifestaciones, no es políticamente correcta? ¿Saben que lo políticamente correcto es no usarla aunque se trate de salvar tu propia vida? ¿Saben que algún político nuestro lo ha declarado así sin creer en aquel carpintero que hace dos mil años lo vino a decir con respecto a sus semejantes? ¿Saben que lo políticamente correcto es que solo el perro la use con nosotros sin tener respuesta?Existe otro problema añadido: la abundancia de tontos de guardia que dedican sus horas de servicio a aconsejarte que ni regañes en tono alto a tu perro porque lo puedes traumatizar y eso, ni es políticamente correcto ni propio de una especie superior.Algo parecido pasó en mi país hace unas décadas, con los cachorros de Homo sapiens, cuando una legión de políticos y psicólogos se empeñaron en que a los niños no se les podía regañar ni darles un pescozón porque se traumatizaban y que no tenían obligaciones de ningún tipo sino solo derecho a tenerlo todo sin necesidad de ganarlo…¡Era lo políticamente correcto! Tampoco podían jugar a cruzados ni a indios y comboyes porque para eso se necesitaban "juguetes bélicos" que estimulaban su agresividad.Pero hete aquí que pasan los años y la conducta de nuestros cachorros, arropados por lo políticamente correcto, se torna tan pacífica y falta de agresividad que comienzan a atizarse en serio entre ellos, llegan a atacar a sus maestros y, si me apuran, hasta a sus propios padres. Pero los creadores de lo políticamente correcto son, como es lógico, los individuos pertenecientes a la clase dirigente de los países desarrollados. A esta clase de elite se les unen una serie de indocumentados que les ríen las gracias y salen en TV hablando de chorradas que tratan de convertir en la filosofía vital del país en cuestión. Entre las tonterías que preconizan está la de no jerarquizar a niños ni animales porque, como ustedes sabrán, el término "jerarquía" suena fatal. Es mejor hablar de amistad, camaradería y buen rollito con los niños y las mascotas. El problema está en que el niño y el perro entiendan con exactitud estos conceptos.Hay una estrategia en la naturaleza que suele optimizar la tasa de aptitud del individuo que la practica y consiste en hacer lo contrario de lo que hacen los demás. Pues bien, estos cantamañanas indocumentados, en aras de un snobismo ramplón y sin idea de Etología, juegan a deshacer las normas que rigen en cualquier sociedad animal y, por supuesto, en la humana. De esa forma tratan de ser unos individuos "guays" y "enrollados" que, en lenguaje canino, debe ser algo así como unos calzonazos dispuestos a todo por quedar bien. ¿Pero saben lo mejor? Que una gran parte de estos individuos guays llevan a sus retoños a colegios de pago, de mucho pago, donde los conceptos de disciplina y jerarquía forman el plato fuerte de su formación. También sus mascotas pasan por manos expertas que, por supuesto, adiestran en jerarquía al perro bandarra que ha pasado parte de su vida asustando al personal. Y es que hay que tener hijos y perros civilizados y, según dicen ellos a quien quiere oírles, eso se consigue sin la más ligera idea de disciplina ni jerarquía; solo con amistad, camaradería y buen rollito.Pensarán ustedes que ando un poco cabreado, fuera de mi tono normal y no políticamente correcto. Pues llevan ustedes razón. Últimamente, y a mi edad, pretendo que me influya más lo científico y lo lógico que lo políticamente correcto. Pretendo no ver en mi consulta niños pequeñitos mordidos por el "perrito incomprendido". Pretendo que nuestro perro siga siendo el animal del que les he hablado en estos casi treinta últimos artículos y, por supuesto, pretendo que ustedes puedan aprovechar algún consejo mío para tener una convivencia más gratificante con Truco. Y este consejo se lo reitero hoy: Sea usted un buen lider de su amigo porque él no busca en usted ni a un enrollado, ni a un calzonazos ni a un guay. Solo quiere vivir con la seguridad de que el dominante está ahí por lo que pudiera pasar. Lo demás le importa una higa al igual que a mi lo políticamente correcto.